Trabaje con un fotógrafo que alguien le haya recomendado y siempre verifique su sitio web antes de contratarlo para ver si su estilo “pega” con su alojamiento.
Nuestros mejores consejos
Tenga una primera foto que llame la atención del cliente al instante.
Cuente una historia con sus fotos: ilustre al cliente la llegada y la experiencia de alojarse con usted.
Haga que el lugar parezca acogedor con flores frescas, una chimenea encendida, las camas bien hechas; cualquier cosa que ilustre la experiencia de alojarse con usted. Después, muestre el exterior, el jardín, y la vista.
Haga que su espacio parezca hogareño. Abra las puertas y ventanas por dentro y por fuera.
Si es el dueño de un pub u hotel, muestre también el bar y el restaurante, no solo el exterior y las vistas.
Si es el dueño de una posada, es importante mostrar donde desayunan los clientes.
No muestre fotos parecidas del mismo cuarto.
Muestre la mejor perspectiva posible del cuarto. Evite tener una fuente de luz o ventana detrás de la persona que saca la foto, si no la foto parecerá demasiado oscura.
Incluya fotos de los alrededores más cercanos, para dar a los clientes una idea de su ubicación exacta (por ejemplo, la calle si es una casa en hilera o la playa si está cerca de la costa).
Use fotos de primeros planos de objetos solamente si demuestran atención a los detalles y el carácter del lugar. Puede que una foto de un grifo en el baño o de una lampara muestre la calidad del lugar, pero no ayuda a los huéspedes a hacerse una idea de la experiencia de alojarse en un sitio como el suyo.
Horizontal no vertical: no olvide que las fotos deberían ser siempre apaisadas (más anchas que altas).
Cuanto más grandes mejor: las fotos tienen que medir entre 1 y 5MB; nuestro sitio se encargará del resto.
